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Régimen de Daniel Ortega apuesta a una “política exterior parasitaria”

*Entre 2007 y 2017, la cooperación de Holanda al sector público de Nicaragua significó US$103.8 millones de dólares. A partir de 2018, la contribución al país centroamericano fue suspendida debido a las graves violaciones de derechos humanos por el régimen de Daniel Ortega, aunque mantuvo la dirigida al sector privado.

*El régimen expulsó a la representante de la Unión Europea, la alemana Bettina Muscheidt y no aceptará al nombrado nuevo embajador de Estados Unidos en Nicaragua, Hugo Rodríguez.


Expediente Público

El régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo sigue autoaislándose de la comunidad internacional y en menos de un año, después de suspender relaciones diplomáticas con Taiwán, rompió con el Reino de los Países Bajos por lo que llamaron su reiterada posición “injerencista, intervencionista y neocolonialista”, una decisión que agudiza la crisis con Europa y fue calificada como “desproporcionada” por el ministro de Relaciones Exteriores de ese país, Wopke Hoekstra.

“Tomamos una posición firme sobre el deterioro de las estructuras democráticas y las violaciones de los derechos humanos en Nicaragua. Pero una discusión crítica siempre es mejor que terminar con las relaciones”, señaló Hoekstra.

El diplomático advirtió que, al igual que Holanda, otros países también notan “dificultades para mantener un diálogo abierto con Nicaragua”. “Discutiremos nuestros próximos pasos con la Unión Europea”, advirtió Hoekstra.

En el año 2009, Manuel Coronel Kautz, quien en ese entonces ejercía de ministro de Asuntos Exteriores en funciones, dijo calificó a Holanda como un “paisucho” debido a las críticas hechas por el fallecido político liberal holandés Hans Van Baalen, quien desde ese entonces ya alertaba sobre la peligrosa deriva autoritaria del gobierno de Ortega.

Carlos Barrachina, profesor investigador del Instituto Mexicano de Estudios Estratégicos y de Seguridad Nacional, en entrevista con Expediente Público afirmó que Ortega con su escalada de agresiones contra la comunidad internacional está agravando la posición del país centroamericano.

Le hace el juego a potencias

“Les hace los juegos a algunas potencias, lo de Taiwán (refiriéndose a cuando cortaron las relaciones diplomáticas) puede ser por esa relación con China, o con ese intento de acercamiento con Rusia, a esa izquierda de la guerra fría que ya pasó de moda. Aunque sí las tensiones de Estados Unidos con China, sí se están agravando en los últimos meses”, dijo Barrachina.

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La nota diplomática, firmada por el canciller del régimen nicaragüense, Denis Moncada, acusó a Holanda de una “ofensiva permanente de la representación, nada diplomática y violatoria de la Convención de Viena, de ese gobierno neocolonial y pro-imperial”.

El fin de las relaciones diplomáticas con Holanda, miembro de los 27 países que conforman el bloque de la Unión Europea, se da casi diez meses después que el régimen de Daniel Ortega puso fin al acercamiento que tenía con Taiwán, uno de sus principales donantes, para reconocer a la República Popular China como el “único gobierno legítimo que representa a toda China”.

Ortega en un discurso virulento contra Holanda

En un discurso, la noche del 30 de septiembre durante un desfile policial, Ortega dijo que el canciller Moncada recibió en su oficina a la embajadora de Holanda para Centroamérica, Christine Pirenne, y la acusó de querer hablarle como si “Nicaragua fuera una colonia holandesa”.

“La embajadora venía a hablarle a los nicaragüenses, como que Nicaragua era una colonia holandesa, y luego de lanzar aquel discurso atropellante para la dignidad de nuestro pueblo, comunicó que no iban a construir el famoso hospital”, dijo Ortega en su discurso virulento.

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Ortega se refería a un proyecto de construcción y equipamiento del Hospital Regional de Bilwi, Nuevo Amanecer, en el Caribe Norte de Nicaragua, cuya cooperación fue suspendida por Holanda en 2018, debido a las “graves violaciones de derechos humanos cometidos por oficiales del gobierno y grupos parapoliciales”, según una nota del 7 de julio de 2018 publicada por ese gobierno.

Además, Ortega calificó como “miseria humana” la suspensión de la construcción del hospital.

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Desprecia cooperación

El exembajador nicaragüense ante la Organización de Estados Americanos (OEA), Arturo McFields, dijo a Expediente Público que las acciones de Ortega se dan en un “contexto de desesperación y sobrevivencia”.

“En su afán de permanecer en el poder a toda costa, creo que la dictadura está apostando por una política exterior parasitaria hacia Rusia en el que todas sus decisiones giran en relación a lo que le interese al Kremlin (Rusia) y no necesariamente al pueblo nicaragüense”, dijo McFields.

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Según cifras del Banco Central de Nicaragua (BCN), en 2021, Holanda contribuyó con 32.7 millones de dólares al sector privado, que fueron distribuidos en el sector de agricultura, ganadería, pesca y silvicultura; industria manufacturera; intermediación financiera y otros sectores.

El Informe de Cooperación Oficial Externa de Nicaragua muestra que el sector público acumuló 103.8 millones de dólares entre 2007 y 2017. Sin embargo, a partir de 2018 la misma fue suspendida, reflejan los mismos datos del BCN.

Entre 2018 y 2019, la crisis de derechos humanos en Nicaragua dejó 355 personas asesinadas y más de dos mil heridos. A la fecha se estima que más de 150 mil personas salieron al exilio forzado por la persecución y asedio del régimen de Daniel Ortega.

Régimen de Daniel Ortega agrava crisis con Europa

Previamente, el régimen ordenó la expulsión de la embajadora de la Unión Europea (UE) en Nicaragua, Bettina Muscheidt, lo que agrava aún más la crisis con este importante bloque de países democráticos.

Se reportó que Muscheidt, quien asumió el cargo en Managua en septiembre del 2021, abandonó el país centroamericano este primero de octubre, tras ser declarada non grata por Ortega. El portavoz del Servicio Exterior europeo, Peter Stano, sin embargo, confirmó que Muscheidt fue citada esta semana por el Ministerio de Relaciones Exteriores de Nicaragua.

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Sobre los últimos acontecimientos diplomáticos, la oficina del Alto Representante de la Unión Europea en una declaración emitida este 2 de octubre, un día después de la salida de Muscheidt, lamentó profundamente y rechazó la «decisión injustificada y unilateral».

«Estas acciones hostiles e injustificadas no solo afectarán las relaciones bilaterales entre Nicaragua y la Unión Europea y sus Estados miembros, sino que también conducirán a un mayor aislamiento internacional de Nicaragua. En este contexto, la Unión Europea está considerando el camino apropiado a seguir y responderá de manera firme y proporcionada», señala la declaración.

“En el ámbito político fundamentalmente está plegándose al juego geopolítico de Rusia como un peón que podría ser útil a Rusia para meter ruido en la región centroamericana. Carecen de política exterior, están en una política exterior parasitaria y en modo de sobrevivencia”, insistió el exembajador McFields.

La alemana Bettina Muscheidt había llegado a Nicaragua en sustitución del español Pelayo Castro Zuzuárregui quien ejerció como embajador en el país centroamericano entre 2019 y 2021.

El régimen optó por expulsar a Muscheidt después que el delegado de la Unión Europea ante la Organización de Naciones Unidas (ONU), Charles Michael, exhortó al régimen a “devolver la soberanía de Nicaragua al pueblo nicaragüense”.

La Unión Europea sostiene que la crisis política en Nicaragua debe resolverse a través de un «diálogo genuino» entre el gobierno y la oposición.

Confirman rechazo a embajador de EE.UU.

Ortega también arremetió contra los miembros del Senado de Estados Unidos, que el 29 de septiembre, confirmaron al diplomático Hugo Rodríguez como embajador por Estados Unidos para Nicaragua.

Rodríguez está a favor de usar todos los instrumentos económicos y diplomáticos para presionar cambios democráticos en Nicaragua, país donde se siguen violando los derechos humanos, pero el régimen ha dicho que “bajo ninguna circunstancia” será admitido.

“Ya se sienten como dueños del mundo, que pueden comerse a los pueblos (…) Nosotros le dimos el visto bueno cuando llegó la solicitud para el embajador, luego el candidato a embajador para Nicaragua se presentó ante el Senado y llegó a hablar como que venía de nuevo William Walker a Nicaragua”, criticó Ortega.

Ante el rechazo del régimen, la administración del presidente Joe Biden mantiene en sus funciones en Managua al embajador Kevin Sullivan.