EE. UU. redefine su estrategia militar para América Latina 

Estados Unidos redefine su estrategia militar para América Latina 

* Jefe del Comando Sur Alvin Holsey plantea una ofensiva estratégica de Estados Unidos ante actores malignos y ciberamenazas en la región. 

** En la Conferencia de Seguridad Hemisférica, el Comando Sur alertó sobre amenazas compartidas, injerencia china y migraciones masivas en Latinoamérica. 


Natalia López / Cobertura Especial 
Expediente Público 

“Nuestro deber es garantizar la seguridad de nuestras naciones, de nuestros pueblos, y también la estabilidad de nuestros socios en Latinoamérica y el Caribe”, afirmó el almirante Alvin Holsey, jefe del Comando Sur, en su discurso de apertura de la 10a. Conferencia de Seguridad en Miami, Florida. 

La conferencia, organizada por la Universidad Internacional de Florida (FIU), reúne a expertos en defensa, funcionarios de alto nivel y líderes militares para debatir sobre amenazas comunes y oportunidades de cooperación hemisférica. 

En un contexto que está marcado por crecientes desafíos geopolíticos, amenazas transnacionales y fenómenos climáticos extremos, el almirante Holsey, ofreció su visión estratégica sobre los desafíos críticos en América Latina y el Caribe, subrayando el compromiso del Gobierno de Donald Trump con sus socios regionales. 

Suscríbase al boletín de Expediente Público y reciba más información 

Desde su posición como jefe del Comando Sur, el almirante explicó que su responsabilidad es planificar y ejecutar operaciones militares seguras en América del Sur, Centroamérica y el Caribe, con base en una lógica de cooperación multilateral. 

Alvin Holsey, jefe del Comando Sur, junto a Eric Farnsworth, vicepresidente del Council de las Americas y Americas Society, en la FIU. 
Alvin Holsey, jefe del Comando Sur, junto a Eric Farnsworth, vicepresidente del Council de las Americas y Americas Society, en la FIU. 

Ejes estratégicos de EE.UU.

Holsey identificó tres ejes principales para abordar la seguridad regional: el reconocimiento de amenazas comunes, la capacidad de respuesta conjunta y el compromiso entre aliados. 

 “Veo tres grandes preguntas: ¿Dónde están los retos? ¿Qué capacidades tenemos y qué piden nuestros socios? ¿Cómo logramos conectar y ejecutar soluciones juntos?”, destacó. 

Entre los principales desafíos mencionó a los “actores malignos” como China, Rusia e Irán, así como a las organizaciones criminales transnacionales, responsables del tráfico de drogas y armas, y del fomento de la migración ilegal. 

Además: Estados Unidos reitera que hay “retroceso democrático” en las Américas 

Tecnología, ciberdefensa y cooperación militar 

Holsey también abordó las crisis derivadas del cambio climático y la fragilidad institucional en varios países. 

 “La temporada de huracanes ya está por comenzar, y debemos estar listos para responder con rapidez a inundaciones y catástrofes”, advirtió. En este sentido, remarcó la importancia de desarrollar infraestructura de respuesta, comunicación regional efectiva y preparación conjunta. 

También mencionó a Haití, Cuba y Venezuela, como territorios en donde la violencia, los desastres naturales y la inestabilidad política están alimentando crisis migratorias y humanitarias de escala regional.  

Lea: General Richardson: actividades de China en América Latina desafían seguridad nacional de EE. UU. 

“La situación en Haití es especialmente grave. Hemos apoyado a la Misión Multinacional de Seguridad con logística aérea, suministros y coordinación en el terreno”, agregó. 

China: influencia, acceso y advertencias 

Uno de los mensajes más enfáticos del Almirante fue sobre la creciente presencia de China en América Latina. 

Holsey recordó que el canal panameño representa uno de los activos logísticos más importantes del hemisferio occidental y lamentó que Beijing haya logrado posicionarse cerca de este punto neurálgico.  

También expresó preocupación por la expansión de la tecnología 5G, las ciudades inteligentes y la venta de armamento desde China hacia gobiernos latinoamericanos. 

De interés: Panamá, tablero de poderes globales 

“No es sólo un tema comercial; es cibernético, estratégico y cultural. La influencia china se basa en aprovecharse de economías débiles e instituciones frágiles”, sentenció. Hizo un llamado a los aliados regionales a reforzar su alineamiento con los valores democráticos y de cooperación militar con EE. UU. 

Proyectos de cooperación 

Holsey destacó que la presencia estadounidense en la región “significa poder”, pero también voluntad de cooperar. En ese sentido, citó ejemplos de operaciones médicas y de ingeniería militar en países como Argentina, Trinidad y Tobago, y Honduras. En este último país, mencionó una iniciativa para instalar clínicas móviles y hospitales temporales para emergencias. 

También resaltó proyectos en aviación, patrullaje marítimo y apoyo satelital en el Caribe, subrayando el valor de estas acciones para la estabilidad regional y afirmó: “Tenemos más de 100 proyectos en ejecución en 70 países. Eso demuestra nuestra capacidad operativa y nuestra intención de estar conectados con la región”. 

Ciberseguridad e innovación: de cara al futuro 

Holsey insistió en que el Comando Sur está invirtiendo en la formación conjunta de expertos en ciberseguridad, tanto de EE. UU. como con sus socios regionales y agregó: “Cada conferencia que tenemos es una oportunidad para educar y entrenar a nuestros aliados. Necesitamos estar preparados para amenazas en el ciberespacio tanto como en el mar o el aire”. 

También resaltó la innovación como una herramienta clave. Citó como ejemplo a Colombia, donde comandos militares cómo la Fuerza Aeroespacial Colombiana (FAC) y la TCO realizaron 150 operaciones el año pasado, aplicando nuevas tecnologías y coordinación multinacional.  

Para Holsey, ese tipo de cooperación “es la hoja de ruta para enfrentar desafíos complejos con soluciones integradas”. 

Migración y el rol de las fuerzas de seguridad 

Frente al fenómeno migratorio, el almirante reconoció la necesidad de adoptar estrategias que no sólo refuercen la seguridad fronteriza, sino que también ataquen las causas estructurales. 

 “Hemos modificado planes de contingencia en Guantánamo para preparar espacios ante una posible oleada de refugiados desde Haití o Cuba”, dijo, sin rodeos. 

En diálogo con líderes regionales como el presidente de República Dominicana, Holsey coincidió en que se requiere “un esfuerzo internacional mayor” para responder al colapso institucional haitiano.  

Aseguró que EE. UU continuará apoyando a la comunidad del Caribe, y otros actores en sus misiones de mantenimiento de paz y reconstrucción institucional.