Régimen ordena cerrar cuentas bancarias de diócesis de la Iglesia católica en Nicaragua

Régimen acusa de lavado de dinero a la Iglesia católica y ordena cerrar sus cuentas bancarias

* Esta semana también fueron detenidos un sacerdote y dos más son «investigados» por la Policía de Nicaragua mientras Daniel Ortega insiste en el discurso de odio contra obispos.

**El régimen Ortega-Murillo aumentó la presión contra la Iglesia Católica para ahogarla financieramente mediante la incautación de sus cuentas bancarias.

*** A través de un comunicado emitido este sábado 27 de mayo, la Policía Nacional sostuvo que se incautaron de “centenares de miles dólares”, sin presentar ninguna prueba.


Expediente Público

Las cuentas bancarias de las diócesis y parroquias católicas de Nicaragua fueron cerradas por orden del régimen de Daniel Ortega, confirmaron fuentes eclesiásticas.

De esta forma continúa la represión contra la Iglesia católica que incluye el encarcelamiento de al menos seis sacerdotes y a un obispo.

El cardenal Leopoldo Brenes, presidente de la Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN), expresó a Expediente Público que no podía confirmar el congelamiento de las cuentas bancarias de las iglesias, pero dijo que en estos momentos «estamos viendo cómo resolver la situación».

La información confirmada con varios sacerdotes es que desde las 11:00 de la mañana de este viernes 26 de mayo no pudieron acceder a las cuentas bancarias, sin que oficialmente se les haya notificado por parte de los bancos locales la razón de esa medida.

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Entre las Diócesis afectadas están las de Matagalpa y Estelí, de quien era el administrador Apostólico Monseñor Rolando Álvarez, condenado a 26 años de prisión por el régimen bajo el falso cargo de «traición a la Patria».

Cierran cuentas bancarias de la Iglesia Católica de Nicaragua

Son las cuentas bancarias de la Iglesia

Una fuente religiosa confirmó a Expediente Público que se trata de las cuentas de la Iglesia católica.

“No he podido ir al banco para comprobar, eso es lo que están diciendo. Dicen que todas las cuentas. Eso sería mucho problema, no se podría llevar bien las finanzas. Son las cuentas de la iglesia las que están congelando. Estamos muy desconcertados”, afirmó la fuente.

El régimen de Daniel Ortega comenzó desde hace varios meses una persecución en contra de la Iglesia católica. A la fecha tres religiosos han sido condenados, incluyendo Monseñor Rolando José Álvarez, quien está encarcelado en el Sistema Penitenciario Jorge Navarro, conocido como “La Modelo”, en Tipitapa.

Álvarez, fue privado de su libertad desde el 19 de agosto de 2022 y está condenado a 26 años y cuatro meses de prisión por los delitos políticos de “traición a la patria y propagación de noticias falsas”.

En Nicaragua se receta cárcel a sacerdotes

Monseñor Leonardo Urbina, párroco de la Iglesia del Perpetuo Socorro, en Boaco y el sacerdote Manuel Salvador García, de la iglesia El Calvario en Nandaime, departamento de Granada, también están encarcelados y pagando condena.

La semana pasada, el 23 de mayo, el régimen detuvo y trasladó a Managua bajo investigación a los sacerdotes Eugenio Pastor Rodríguez, de la Divina Providencia del municipio de Jalapa y Leonardo Guevara Gutiérrez, párroco de la Catedral de Estelí.

Esta semana, la Policía también confirmó la detención del sacerdote Jaime Iván Montesinos Sauceda, de la parroquia San Juan Pablo II de la Diócesis de Matagalpa.

Ortega responsabiliza a los obispos de «conspiradores» con la oposición de haber causado las protestas sociales de 2018, a las que el régimen respondió con una masacre que dejó más de 300 asesinatos.

En marzo del 2023 Ortega rompió relaciones con el Vaticano tras molestarle las declaraciones del papa Francisco quien calificó de «dictadura comunista» y «hitleriana» el sistema de represión en Nicaragua.

Policía acusa a Iglesia de lavado de dinero

La congelación de los fondos eclesiásticos es el último episodio en la escalada virulenta del régimen Ortega-Murillo contra la iglesia católica nicaragüense, que sufre persecución y cárcel debido a la prisión de al menos seis sacerdotes y un obispo.

La Policía de Nicaragua emitió un comunicado, el 27 de mayo, que confirma el congelamiento de las cuentas de la iglesia católica y la acusa de «lavar activos» por supuestamente manejar fondos y cuentas bancarias de «personas condenadas por Traición a Patria».

“La Policía Nacional inició investigaciones que llevaron al hallazgo de centenares de miles de dólares, escondidos en bolsas ubicadas en instalaciones pertenecientes a Diócesis del País”, se lee en una parte del comunicado.

Los uniformados revelan que la Superintendencia de Bancos solicitó a la Conferencia Episcopal de Nicaragua y al Jefe de la Iglesia Nicaragüense, Cardenal Leopoldo Brenes, que presentara los documentos que muestran los movimientos bancarios de la Diócesis.

De acuerdo a la policía sandinista la decisión fue derivada de investigaciones a personajes juzgados, dando a entender que podría tratarse de seguir persiguiendo desde a fuera a todas las personas que defienden a presos políticos de la Diócesis como monseñor Álvarez.

Solidaridad salvadoreña

En El Salvador, el cardenal Gregorio Rosa Chávez, que preside la Parroquia San Francisco, es una de las voces que exhorta por el diálogo y una solución pacífica en Nicaragua.

“Hay mucho sufrimiento en el pueblo nicaragüense y en el católico sobre todo (…) saben que estamos con ellos y deseamos que pronto se vaya normalizando para que haya paz de verdad y la gente pueda expresar su fe libremente”, dijo el prelado católico en un encuentro con la prensa.

“Deseamos que (el conflicto) se vaya resolviendo pacíficamente, que el diálogo vaya finalmente estableciéndose para que todos estemos en paz”, opinó el cardenal Rosa.