* En Guatemala aumentaron los homicidios un 31.5% en lo que va del 2025, con relación a los primeros cinco meses del año pasado.
** Ciudad de Guatemala y alrededores son focos de homicidios, donde a diario hay al menos cinco tiroteos y más de 15 emergencias por hechos violentos.
Marysabel Aldana / Expediente Público
María López, residente de la zona 18 de la Ciudad de Guatemala, perdió a su hijo de 17 años como víctima colateral de un ataque armado.
Parte de lo que vivió ese día lo contó a Expediente Público. “Mi hijo salió de la escuela a eso de las dos de la tarde, yo lo estaba esperando en una esquina, porque no me gustaba que se viniera solo”.
“Al notar que no llegaba empecé a caminar, pero una ambulancia pasó más rápido, me persigné para pedir por la persona que iba allí, sin saber que a quien iban a traer era a mi hijo”, recordó.
López supo después que su hijo iba pasando frente a una tienda cuando esta fue atacada con armas de fuego por la banda criminal que estaba extorsionando a los propietarios y no había recibido el pago habitual.
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“Mi Cristian iba pasando enfrente y también le dieron y lo mataron, mi hijo era un joven estudioso y trabajador. No tenía enemigos”, lamenta.
“Lo mataron sin razón. La policía no ha hecho nada para encontrar a los responsables”, aunque han pasado cuatro meses.
Cifras de violencia extrema
También Carlos Pérez, de Villa Nueva, municipio del departamento de Guatemala, relató a Expediente Público, cómo su esposa fue asesinada en un asalto mientras se dirigía al trabajo.
“La inseguridad nos está matando. Mi esposa era el sostén de nuestra familia. Ahora mis hijos y yo estamos solos y sin justicia”, expresó con tristeza.
Al 24 de mayo de 2025, Guatemala enfrenta una escalada de violencia que ha dejado 1,780 víctimas mortales y un clima de inseguridad creciente.
Según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE), los homicidios aumentaron un 31.5% en comparación con el mismo período del año anterior, en toda Guatemala.
504 muertes violentas ocurrieron solo entre enero y febrero, según datos de la PNC.
Este incremento ha generado preocupación entre la población y ha puesto en evidencia las debilidades estructurales del Estado para garantizar la seguridad ciudadana, a criterio de Benjamin Orellana, experto en Seguridad.
Un panorama de inseguridad
Las cifras revelan que la tasa de homicidios se elevó a 16.6 por cada 100,000 habitantes, frente a 16.1 en 2024.
El Departamento de Guatemala lidera las estadísticas con 128 homicidios tan solo en enero, seguido por 120 en Petén y 114 en Escuintla.
Los cuerpos de socorro reportan entre 5 y 7 ataques armados diarios en la Ciudad de Guatemala, y entre 15 y 17 emergencias relacionadas con violencia diariamente en el Departamento de Guatemala.
Impunidad
Sandino Asturias, del Foro de Organizaciones Sociales, identifica tres factores claves en el aumento de la violencia, empezando por unas estrategias políticas para desprestigiar al Gobierno.
El segundo factor son las reacciones violentas del crimen organizado ante medidas gubernamentales y un tercero sería la impunidad derivada de la falta de investigación y capturas.
A criterio del experto, estos temas coinciden con la ola de violencia que está viviendo Guatemala, pero principalmente por la falta de certeza para que se haga justicia en el país.
Franco Mendoza, economista y politólogo, señala a Expediente Público, que “reina la impunidad” en Guatemala por la falta de certeza jurídica en los casos contra los criminales, que a su parecer, muchas veces son capturados, pero son los jueces quienes los dejan en libertad el mismo día.
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El Estado en deuda con la seguridad
El despliegue de unidades militares de élite, como los kaibiles, en las fronteras norte y sur del país ha generado controversia.
Aunque el presidente Bernardo Arévalo busca detener el tráfico de drogas y migrantes, organizaciones de derechos humanos critican el uso de fuerzas con antecedentes de violaciones a los derechos humanos durante la guerra civil.
Además, la falta de coordinación entre instituciones y la ausencia de políticas públicas efectivas han sido señaladas como obstáculos para mejorar la seguridad. Analistas como Luis Pedro Álvarez y Conrado Reyes destacan la necesidad de acuerdos con sectores clave y la restauración de la confianza en las autoridades.
“Es importante que el Organismo Ejecutivo, empiece a actuar con carácter contra los maleantes, porque no es posible que en Guatemala continúen este tipo de ataques armados”, comentó Álvarez a Expediente Público.
“La violencia en Guatemala ha alcanzado niveles alarmantes, afectando a miles de familias y poniendo en evidencia las falencias del Estado en garantizar la seguridad ciudadana. La impunidad, la falta de políticas públicas efectivas y la cooptación de las instituciones son factores que perpetúan esta crisis”, mencionó reyes a Expediente Público.
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El gobierno de Guatemala sin respuestas claras
Se solicito información al Ministerio de Gobernación de Guatemala y una postura ante la ola de violencia que enfrenta el país, sin embargo, por medio de su oficina de comunicación, enviaron la siguiente información:
“Ante los recientes informes sobre el incremento de hechos violentos en diversas zonas del país, el Gobierno de Guatemala expresa su profunda preocupación y su firme compromiso con la seguridad y el bienestar de todos los ciudadanos”.
Al solicitar una entrevista con las autoridades, los encargados de comunicación mencionaron que no había posibilidad por la agenda del ministro Francisco Jiménez.
Mientras tanto, los Bomberos Voluntarios siguen reportando más de 15 ataques armados diarios en el Departamento de Guatemala.
“Reconocemos que el país atraviesa una etapa difícil en materia de seguridad, marcada por la actividad de estructuras criminales, pandillas y redes de narcotráfico que por años han operado impunemente en distintos territorios”, detalló Gobernación a Expediente Público.
“Sin embargo, queremos dejar claro que desde el Ejecutivo se están haciendo todos los esfuerzos posibles”, finalizó la comunicación oficial.
