*El Club de Madrid reúne a más de 100 exjefes de Estado y de gobierno, así como a expertos y académicos para debatir asuntos concernientes a la democracia.
**Nicaragua no fue invitada a la Cumbre por la Democracia, un evento convocado por Estados Unidos.
Expediente Público
La nicaragüense Berta Valle, esposa del precandidato y preso político Félix Maradiaga, denunció ante el Club de Madrid la situación de crisis política y continua persecución que el régimen de Daniel Ortega y Rosario Murillo mantiene contra todas las voces opositoras.
Además instó a la comunidad internacional para que, haciendo uso de todos los mecanismos legales, se logre el restablecimiento de la democracia en el país centroamericano.
“Daniel Ortega tiene completo control sobre las instituciones del país y apunta a cualquiera que eleve su voz, es una violación de derechos humanos que su régimen comete. Ahora mismo hay más 170 presos políticos en Nicaragua, incluyendo a mi esposo Félix Maradiaga, quien fue arrestado el 8 de junio”, denunció Valle al participar en un panel denominado “Liderazgo democrático en tiempos de incertidumbre” y que fue realizado por el Club de Madrid.
El Club de Madrid es una organización que reúne a más de 100 exjefes de Estado y de gobierno, así como a expertos y académicos para debatir asuntos concernientes a la democracia.
El panel forma parte de los debates que se realizan en el marco del Foro de la Coalición Global por la Democracia, una plataforma que busca ampliar las discusiones de la Cumbre por la Democracia que se celebrará los días 9 y 10 de diciembre de 2021, teniendo como anfitrión al presidente Joe Biden de Estados Unidos.
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La Cumbre agrupará a líderes mundiales, de la sociedad civil y el sector privado y busca “establecer una agenda afirmativa para la renovación de la democracia y abordar las mayores amenazas que enfrentan las democracias actualmente por medio de una acción colectiva”.
Comunidad internacional debe actuar
Valle recordó que este 8 de diciembre su esposo cumple 183 días desde que fue arbitrariamente detenido por el régimen, después de salir de un interrogatorio en el Ministerio Público en Managua.
«Desde que lo arrestaron he estado levantando mi voz junto a Victoria Cárdenas, esposa de Juan Sebastián Chamorro, otro preso político, llamando a la comunidad internacional para que se levante junto al pueblo nicaragüense y para pelear por la libertad de los presos políticos”, mencionó Valle.
A la fecha, según los organismos de derechos humanos y mecanismos de la sociedad civil que monitorean la situación en el país, existen más de 160 personas presas en las cárceles del país por presentarse como opositores al régimen orteguista.
Valle insistió que la comunidad internacional tiene a su disposición varios mecanismos para hacer frente a una crisis política como la nicaragüense.
“Es muy importante hacer un llamado a la comunidad internacional, porque no hay nada que podamos hacer en Nicaragua ahora mismo. Hemos estado llamando a la comunidad internacional, al presidente Biden y su administración en Estados Unidos, hemos estado llamando a la Unión Europea, la Organización de Estados Americanos y a muchas democracias alrededor del mundo para trabajar juntos y que respalden a los nicaragüenses”, enfatizó Valle.
La crisis que vive Nicaragua
Valle aprovechó el espacio y recordó que en 2018 el pueblo nicaragüense salió a las calles para protestar pacíficamente en contra del régimen de Ortega, pero en lugar de respetarle el derecho constitucional de protestar, «hubo violencia” de parte del Estado.
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Al menos 355 personas fueron asesinadas durante la represión de las protestas en Nicaragua desde abril de 2018 hasta julio de 2019, según actualización que hizo el 15 de noviembre de 2021 la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) sobre el registro de víctimas fatales en el contexto de la crisis de derechos humanos.
“La gente nicaragüense hizo nuestras voces escucharse en el 2018, pero vimos cómo el gobierno nos respondió con violencia y así fue en noviembre pasado que se supone que teníamos elecciones y los nicaragüenses mostraron su desaprobación por el régimen al no participar en la farsa electoral, organizaciones independientes reportan abstención calculada de más del 80%”, denunció Valle.
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La opositora señaló que Ortega tiene la intención de permanecer en el poder por un cuarto mandato ilegal, una mala señal para las democracias en el mundo.
«Si la comunidad internacional no hace nada, envía un mensaje peligroso a otras democracias frágiles y otros dictadores. Este es un mensaje muy peligroso a las otras democracias frágiles alrededor del mundo y también a líderes autocráticos. Eso ataca a la democracia si o permitimos y eso es un mensaje que si la comunidad internacional no actúa va a ser triste”, mencionó la esposa de Maradiaga.
Valle insistió que la libertad de los presos políticos debe ser el punto de partida y el primer paso importante para que prospere la democracia en Nicaragua.
Club Madrid: “Retroceso democrático”
En las últimas décadas, según el Club Madrid, se observó un “inquietante retroceso democrático en todas las regiones del mundo”, que ha sido exacerbado por la pandemia de la Covid-19, lo que ha desencadenado un “ciclo de declive y deterioro democrático” como se ha visto recientemente en Nicaragua, un país centroamericano; Bielorrusia, ubicado en la Europa oriental; y Myanmar, una nación del Sudeste asiático.
Este ciclo observado en los últimos años a menudo comienza con un ataque a la democracia en forma de crisis o emergencia que los gobiernos nacionales y sus líderes no están preparados para abordar y en consecuencia facilita el “surgimiento de regímenes autoritarios y movimientos populistas”, señaló el Club de Madrid.
El Foro busca brindar una plataforma para voces, actores y temas que pueden no ser parte de la Cumbre oficial y, por lo tanto, tiene como objetivo ampliar las discusiones de la Cumbre.
Nicaragua excluida de la Cumbre
Desde el primer día, la administración del presidente Biden dejó en claro que es esencial renovar la democracia en los Estados Unidos y en todo el mundo en un momento de auge de gobiernos autócratas.
“La cumbre se centrará en los desafíos y oportunidades que enfrentan las democracias y proporcionará una plataforma para que los líderes anuncien compromisos, reformas e iniciativas tanto individuales como colectivas para defender la democracia y los derechos humanos en el país y en el extranjero”, señala el sitio oficial del Departamento de Estado.
El presidente de Estados Unidos invitó a participar a más de 100 países, pero se excluyó al gobierno de Daniel Ortega y Rosario Murillo.
Brasil, Argentina, Chile, Colombia, Ecuador, México, Paraguay, Perú, Costa Rica, Ecuador. México, Panamá, Paraguay, Perú y Uruguay aparecen en la lista de países de las Américas invitados a participar, pero fueron excluidos Venezuela, Cuba, Nicaragua, Bolivia, Guatemala y El Salvador.
