Reformas electorales

Reformas electorales en Honduras, un laberinto de trampas y derroche de dinero

*El Gobierno de Xiomara Castro ha aumentado el presupuesto del Consejo Nacional Electoral (CNE) con la intención de hacer reformas electorales y consultas populares.

**Representantes del Partido Nacional afirman que la propuesta de segunda vuelta presidencial, es un tema distractor de las situaciones importantes en el país.


Yarely Madrid / Expediente Público

La intención del Gobierno de Xiomara Castro de realizar reformas electorales, abrirá una “caja de pandora” en el sistema político hondureño cuyos alcances todavía no están claramente definidos.

Las reformas electorales en este país centroamericano no son algo nuevo. Sin embargo, alcanzaron mayor relevancia luego del golpe de Estado al expresidente Manuel Zelaya Rosales (2006-2009), con el nacimiento del partido de Gobierno Libertad y Refundación (Libre) que rompió el bipartidismo entre el Partido Nacional y Liberal que imperaba en el país.

Ahora el Gobierno de la presidenta Xiomara Castro prepara el terreno para estas reformas desde su toma de posesión, el 27 de enero del 2022. En su discurso la mandataria habló de “la primera histórica y transparente consulta popular sobre reformas constitucionales”.

¿Qué reformas electorales quieren?

En los últimos días, el vicepresidente del Congreso Nacional y también presidente de la Comisión de asuntos electorales, Rasel Tomé, dijo a medios de comunicación que la reforma para implementar una segunda vuelta presidencial o balotaje en Honduras, sería la primera consulta popular que realizaría Libre.

Para la implementación de esta nueva figura dentro de la Constitución es necesario reformar el artículo 236 que habla de elegir al presidente por simple mayoría de votos, pues el objetivo es que, si un candidato no logra sacar más del 45% de los votos, exista esta segunda opción para garantizar un proceso más democrático. Actualmente esa modificación al artículo se encuentra en debate en el Congreso Nacional.

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Objetivos de Libre

Las reformas electorales son algo importante para Libre. El Presupuesto General de la República del 2022, aumentó en 400,000 millones de lempiras (unos 16, 218,749dólares) para el financiamiento del Consejo Nacional Electoral (CNE).

El secretario del Congreso y cuñado de la presidenta Xiomara, Carlos Zelaya, explicó en su momento a medios de comunicación que este incremento sería destinado a mejorar el CNE y realizar “consultas populares”. Una decisión que se tomará si no se llega a consensos en el Congreso Nacional para incluir la segunda vuelta presidencial.

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El año pasado no se hizo ninguna consulta popular, pero aun así el gobierno aumentó este 2023 el presupuesto del CNE. Por ejemplo, en el 2022 fue de 299,160,757 lempiras (12,125,235 dólares) y este año de 524,332,071 lempiras (21,250,721 dólares). La diferencia entre ambos fue de casi el doble (225,171,314 lempiras, es decir unos US$9,126,510).

Además, en febrero del 2022, se creó la comisión de Asuntos Electorales para socializar este tipo de reformas dentro del Congreso.

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La segunda vuelta

La primera reforma electoral y la más socializada en el Congreso hasta el momento es la segunda vuelta presidencial. Esta consiste en reformar el artículo 236 de la Constitución que expresa que “los designados a la Presidencia de la República, serán elegidos conjunta y directamente por el pueblo, por simple mayoría de votos”, es decir menos del 50% de los votos.

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De acuerdo al dictamen que plantea la comisión de Asuntos Electorales del Congreso, al que logró acceder Expediente Público, el artículo ahora incluirá que un presidente y tres designados presidenciales serán electos por mayoría de votos “si alcanza más del 45% de los votos válidos”.

Si el candidato más votado no alcanza el 45% pero aventaja a su rival con más del 5%, se declara presidente. Si no lo logra, entonces se celebrarán una segunda vuelta o balotaje.

Esta reforma hasta el momento tiene el apoyo de Libre, el Partido Liberal y el Partido Salvador de Honduras (PSH). Sin embargo, para llevarla a cabo necesitan 86 votos (mayoría calificada) además deberá ser aprobada en la siguiente legislatura (2024).

Hasta el momento estas tres fuerzas políticas suman 82 votos, por lo que deberán llegar a consensos con el Partido Nacional, que en otros periodos presidenciales ha rechazado agregar esta figura a la Constitución.

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“Segunda vuelta es un distractor”

La diputada del Congreso Nacional por el Partido Nacional, Johana Bermúdez, dijo a Expediente Público que “Libre sabe que no tiene los votos necesarios para llevar a cabo una reforma y en realidad no están interesados en la segunda vuelta en el país, porque ellos saben que en este momento y con la percepción que tiene la población, muy probablemente ellos sean los mayores perdedores en la segunda vuelta”.

Reformas electorales

“Nosotros creemos que en este momento el problema prioritario debe ser solucionar los problemas urgentes para el país”, indicó.

La intención de Gobierno con la segunda vuelta según la congresista es “un franco distractor de los problemas reales del país con el tema de la inseguridad, el tema de la extorsión, el tema de la educación, de la migración o los temas sociales”.

“Estamos estudiando todos los escenarios. Estamos revisando los países donde la segunda vuelta ha sido efectiva o donde la segunda vuelta ha fortalecido la participación, donde la segunda vuelta ha aumentado la credibilidad del gobierno, pero sobre todo también en aquellos países donde la segunda vuelta no supone tanto costo al país”, explicó Bermúdez.

“Lo que les interesa únicamente es medir nuestra fuerza política sin importar el costo económico que impera llevar a cabo una segunda vuelta”, manifestó.

¿Un ensayo para consulta popular?

La Comisión de Asuntos Electorales realizó Mesas de Socialización Regionales en La Ceiba, Choluteca, San Pedro Sula y el Distrito Central para socializar las reformas que consisten en la segunda vuelta y la separación de las fechas elecciones.

De acuerdo a un informe compartido a Expediente Público, estas Mesas consistían en preguntar a 401 personas en representación de los 4 partidos políticos (Libre, Nacional, Liberal y PSH), sociedad civil, empresa privada y sectores privados si estaban de acuerdo con estas dos reformas.

De acuerdo a dicho informe, esto permite a la comisión que “proponga al Pleno del Congreso para que en la aplicación del artículo 5 de la Constitución de la República y mediante una Consulta Popular llevada a cabo por el Consejo Nacional Electoral, se le pregunte al pueblo sobre estos dos temas”.

¿Cómo se convoca a Consulta Popular en Honduras?

Para realizar la Consulta Popular es necesario implementar lo dispuesto en artículo 5: Convocar un referéndum sobre una ley ordinaria, una norma constitucional o su reforma aprobada para su ratificación o improbación por la ciudadanía.

El plebiscito en cambio se utiliza para convocar a los ciudadanos para consultarles aspectos constitucionales, legislativos o administrativos.

Quienes tienen el poder para solicitar el referéndum o plebiscito son al menos el 2% de los ciudadanos inscritos en el Censo Nacional Electoral, de acuerdo al CNE; al menos 10 diputados del Congreso Nacional; y el presidente de la República en resolución de Consejo de Secretarios de Estado.

Además, el CNE es el ente que debe organizar la consulta. Una vez conocido los resultados, debe informar en un plazo de 10 días al Congreso. Finalmente, el legislativo debe emitir un Decreto ordenando la puesta en vigencia que resulten de la consulta.

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Separación de fechas

Esta propuesta consiste en separar las votaciones de nivel presidencial de los demás niveles de elección popular, es decir, de las de diputados y municipales.

El objetivo será que la población ejerza su sufragio sin ninguna influencia más que el de seleccionar a sus representantes territoriales de forma consciente y no por inercia como ocurre en la mayoría de las elecciones.

Para lograr esta propuesta se debe reformar la Ley Electoral en el artículo 211 y 212.

Otras reformas electorales

La ‘ciudanización’ de las Juntas Receptoras de Votos (JRV) es otra propuesta que consiste en que las juntas estén integradas por ciudadanos independientes, sin afiliación política. Para esto se debe reformar el artículo 46 de la Ley Electoral.

Por otro lado, también se propone la despartidización de los órganos electorales, es decir, se debe elegir un pleno de consejeros del Consejo Nacional Electoral sin vínculos políticos partidarios, con el propósito de fortalecer la imparcialidad e integridad de los procesos electorales.

Para este fin es necesario reformar el artículo 52 de la Constitución de la República para que se agregue que los aspirantes que hayan ejercido cargos de partidos no puedan postularse para el cargo.

Otra propuesta son las diputaciones por distrito y no por departamentos con el fin de que las papeletas sean más simples y el elector pueda elegir de mejor forma.

No obstante, en el Congreso Nacional estas tres últimas propuestas no han sido discutidas aunque es posible que sean propuestas por el CNE que se encuentra preparando una iniciativa de Ley con un conjunto de reformas que contendrá asuntos como el manejo técnico electoral, el voto electrónico y otros procedimientos.

¿Son necesarias las reformas electorales?

Luis León, director del Instituto Holandés para la Democracia, una organización que también está impulsando estas reformas electorales, aclaró a Expediente Público que la segunda vuelta presidencial es algo necesario, puesto que en “Honduras, excepto en las elecciones anteriores, los presidentes nunca son electos por mayoría y el concepto democrático determina que es la mitad más uno de la gente que determina su Gobierno”.

“Una segunda vuelta garantizaría que sean las mayorías que escojan al presidente y esta adicionalmente garantizaría que haya gobernanza, que haya respaldo no solamente popular, sino respaldo sectorial a los gobiernos”, manifestó.

Reformas electorales

Otra de las organizaciones que impulsa este proceso, La Red por la Equidad Democrática en Honduras (REDH), explica en su propuesta de reformas a la que accedió Expediente Público que durante las Elecciones Generales del 2021 se observaron temas como “clientelismo electoral y compra de votos, observación de la conflictividad y violencia política electoral y financiamiento político de las campañas”.

¿Qué dice la ONU sobre las reformas en Honduras?

Lo anterior también es validado por la Misión de Observación Electoral (MOE) de la Unión Europea y por la representante de las Naciones Unidas en Honduras, Alice Shackelford, quien mencionó en noviembre del 2022 a través de su cuenta de Twitter que urgen las “reformas electorales para fortalecer el desarrollo sostenible, los derechos humanos y la paz en el país centroamericano”.

Las decisiones en materia electoral no son algo nuevo. En el 2021 unos días antes que se convocara a Elecciones Generales, fue aprobada en Congreso una nueva Ley Electoral y en el 2019 a través de una reforma el Tribunal Superior Electoral (TSE) se convirtió en el CNE y se creó el Tribunal de Justicia Electoral (TJE).

No obstante, el dirigente nacionalista, Fernando Anduray recomendó que estas reformas no fueran discutidas, ni contaminadas con “intereses personales de candidatos presidenciales, sino darse en el seno de la sociedad civil, de las directivas o grupos organizados de los partidos políticos, para que se fortalezca el sistema electoral de los hondureños y la democracia”.

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