*Empresario y expresidente de la Asociación de Industriales (ANDI), Adolfo Facusse, estima que lo único que pueden enseñar los docentes cubanos, es a cómo ser sometidos bajo un régimen explotador y dictatorial.
**Maestros cubanos enseñarán a “leer y escribir”, pero gobierno hondureño negó la oportunidad de contratar a más de mil docentes nacionales para hacer esta misma labor.
Sharon Ardón / Expediente Público
A poco de cumplirse 6 meses del convenio educativo entre Honduras y Cuba en octubre del 2022, en el que se recibió en este país centroamericano a 126 profesionales cubanos para capacitar y asesorar a los docentes hondureños y “refundar” el sistema educativo de Honduras, todavía no se tiene un informe del desarrollo de este programa.
Economistas y empresarios entrevistados por Expediente Público conciben este proyecto como un paso en la agenda ideológica del declarado gobierno socialista democrático de la mandataria Xiomara Castro.
También se plantean contrastadas opiniones por parte de los expertos en la erogación mensual y anual que representa la recepción de 126 maestros cubanos en Honduras quienes, arribaron al territorio desde el 20 de diciembre del 2022, dos meses después de la firma del convenio y dos meses antes del inicio de clases.
Gastos de hospedaje, alimentación y viáticos, entre otros son los gastos que corren por parte del Estado hondureño, lo que se obtiene de los impuestos de los ciudadanos del país.
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Aprender a ser sometidos
“¿Qué pueden aportar los cubanos a los hondureños si es algo que no tienen? ¿El mejor sistema de educación mundial?”, se cuestionó el empresario y expresidente de la Asociación de Industriales (ANDI), Adolfo Facusse.
En ese sentido, Facusse explica que de un gremio pobre en recursos aludiendo a Honduras, a otro en peor situación como lo es Cuba, con “un sistema bajo el control absoluto del Gobierno y de una economía fracasada”, lo único que estos podrían enseñarle a los docentes y alumnos hondureños, es cómo ser sometidos bajo un régimen explotador y dictatorial.
“La lógica nos indica que en lo que los maestros cubanos sí tendrían experiencia y nos podrían enseñar o dado el caso, indoctrinar, sería en enseñarle al pueblo hondureño a no protestar por las limitaciones como serían la falta de medicinas, la falta de empleo, la violencia y el pobre presupuesto que este Gobierno destina para educación; y a acostumbrarse sin protestar a un futuro Gobierno antidemocrático, que eso es en lo que tienen maestría los cubanos”, sostuvo.
Sin conocimiento especializado
Por otro lado, el empresario analiza que las “bondades que pueden aprenderse de los cubanos aplicables en Honduras”, tal como lo es el leer y escribir, no son problema para los profesores hondureños.
“Si fuese en matemáticas, álgebra, geometría, cálculo, física, química, etc. pues bien, habría que ver las especialidades de cada uno de los enviados y si no hay hondureños capacitados en esas materias”, expresó.
Por lo que, para el expresidente del ANDI, “los colegios magisteriales y los profesores hondureños, deberían sentirse humillados por esta disposición del Gobierno, disposición que ni siquiera ha sido consultada con ellos”.
De igual forma coincide el exintegrante del Foro Social de Deuda Externa y Desarrollo de Honduras (FOSDEH) y economista independiente, Ismael Zepeda quien considera que lo que se está destinando en la contratación de maestros cubanos, “bien se pudo encontrar esa oferta profesional en nuestro país”.
Además, este convenio conlleva “otorgar recursos” importantes del presupuesto destinado para la educación de Honduras y “fomentar sistemas de explotación internacional como ha sido denunciado Cuba por varios años”.
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Pasos incoherentes
Expertos entrevistados por Expediente Público coinciden en que el convenio educativo entre estos dos países corresponde más al cumplimiento de una agenda ideológica que a un verdadero interés de mejorar la calidad educativa del país hondureño.
“Al ver la contratación de los maestros cubanos, uno lo que ve es la cortina de ideologización de las políticas públicas, no vemos entonces como coherencia ante las deficiencias del sistema educativo que pueda resolverlo por ejemplo los cubanos”, sostuvo Ismael Zepeda.
Facusse, también percibió que “la única razón por la que el Gobierno promueve esta medida parece ser ideológica”.
“Este es un gobierno de izquierda instalado en un país fundamentalmente de derecha, y en lugar de concentrarse a hacer un buen Gobierno para mostrar las ventajas de ese sistema, parece que creen que se debe indoctrinar a la población”, subrayó.
La bancada del Partido Nacional de Honduras también se pronunció referente a este convenió y emitió un comunicado en el que señala que se trata de una “injerencia ideológica”.
“El pueblo hondureño debe estar alerta para frenar la injerencia de Cuba en la conciencia de los niños y jóvenes de nuestro país”, reza el comunicado.
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Gobierno demuestra no importante las críticas
El 13 de abril del 2023, las autoridades hondureñas sostuvieron una nueva reunión con la delegación de Cuba con el propósito de abordar “la cooperación en materia de educación para Honduras”.
Para el economista hondureño, Wilfredo Girón, la recepción de profesionales cubanos en el país no representa una erogación económica grande al país, y que además el enfoque principal debe ser el alfabetizar a la población hondureña.
A su criterio, el beneficio económico que se tendrá al alfabetizar al pueblo hondureño será grande porque la fuerza de trabajo se tecnifica en otro nivel y eso más adelante será una ayuda económica para el país.
¿Trae algo bueno?
“No hay que verlo únicamente desde el punto de vista estrictamente financiero de cuánto se gasta, sino que todo el beneficio de capacitar esa fuerza de trabajo que después la empresa privada y el mismo Estado lo absorbe para producir”, sostuvo a Expediente Público.
Girón estimó que se debe separar “la cuestión ideológica” de este tema. “Aquí se traen extranjeros de todo tipo, vienen gringos y europeos a asesorar, vienen de todos lados y ahí no se dice nada y ¿por qué cuando vienen unos pocos cubanos ahí empieza la propaganda?”, cuestionó.
Presupuesto de Educación
Los expertos abordados por Expediente Público, la educación es uno de los principales renglones de egreso del país centroamericano.
A inicios del 2023 se le inyectó 4 mil millones de lempiras al presupuesto de educación haciendo un total de 38 mil 109 millones, es decir unos U$ 1,547,613, al cambio actual.
Según un estudio de Fosdeh, hasta marzo del 2023 “se ha ejecutado” el 11%, lo que equivale a 4 mil 388 millones de lempiras (unos U$ 176,166,960).
A pesar de incrementar los recursos al sector educación, Zepeda dijo que hasta el momento no se ha visto la mejoría, efectividad o la eficiencia de la educación en nuestro país.
El maestro de educación primaria, Onan Calix acotó que el presupuesto que les han asignado a los docentes cubanos en Honduras es “un poco exagerado visto desde el punto de que es una situación de cooperación y no de contratación”.
La Secretaría de Educación (SEDUC) tiene un presupuesto de más de 38 millones de lempiras (U$ 1,544,715) de los cuales, hasta el momento no se detalla cuánto se destina al pago de los profesionales cubanos.
Sin embargo, para Calix, con la cantidad de dinero que podría ser asignada para los docentes cubanos, “debió asignarse más bien para la contratación de unos mil docentes hondureños”.
El exdirigente magisterial, estima que en el país hay más de 40 mil docentes que todavía no adquieren un espacio en el sistema educativo, por lo que no entiende porqué contratan a profesionales extranjeros para cubrir proyectos.
Se tenían otras expectativas
Calix resalta el sentir de muchos docentes, los cuales han expresado en diversas ocasiones a Expediente Público que tenían otras expectativas sobre cómo desarrollaría la educación en el Gobierno de Castro.
El docente hondureño explicó cómo el único avance que se tiene en materia de educación ha sido el de retornar a la presencialidad, pero se ha hecho con las mismas deficiencias de años anteriores, es decir, sin una buena infraestructura, sin material logístico y sin darle solución a los problemas de agua potable que hay en varios centros educativos.
“Teníamos otras expectativas. Sinceramente, hasta el momento no se nos ha cumplido una tan sola expectativa de la que teníamos los docentes en el país”, exteriorizó.
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Opacidad del trabajo de docentes cubanos
Desde que se firmó el convenio en octubre del 2022, y la llegada de los profesionales cubanos al territorio hondureño dos meses después, los cuales fueron desplazados entre los 298 municipios del país, no se conocen más detalles tanto de su estadía y desempeño frente a la educación hondureña.
Tanto el salario que se les paga a cada uno de los cubanos, como la erogación mensual que sale del presupuesto de la Secretaría de Educación se mantiene en total secreto. Expediente Público hizo la consulta formal al portal de transparencia de dicha secretaría y hasta la publicación de este artículo no se obtuvo respuesta.
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De igual forma, se trató de contactar al ministro de educación, Daniel Esponda, quien no contestó ni las llamadas, ni mensajes. Los docentes consideran que ya es el tiempo oportuno para que el ente que está a cargo de este proyecto presente un informe.
“Yo creo que es propicio que la Secretaría de Estado en el Despacho de educación comiencen a dar el primer informe de que hemos avanzado, qué están haciendo, cuáles son los planes, programas y proyectos que están siguiendo y qué metodología están utilizando los docentes cubanos”, puntualizó el exdirigente magisterial, Onan Calix.
