* Durante el juicio contra el exmandatario hondureño Juan Orlando Hernández capos detenidos declararon haber contratado sicarios para silenciar a hondureños que luchaban contra el narcotráfico, entre ellos, periodistas y fiscales.
** En Honduras, partidos políticos piden reabrir casos para esclarecer muertes y enjuiciar a actores de estos crímenes.
Sharon Ardon / Expediente Público
En el marco del juicio contra Juan Orlando Hernández (JOH) por cargos de narcotráfico en Estados Unidos, se presentaron testimonios que desvelan la implicación de asociados del expresidente de Honduras en los asesinatos a ciudadanos hondureños que denunciaban activamente el tráfico de drogas en el país.
Tal es el caso de Arístides González, quien fue asesinado el 8 de diciembre del 2009 mientras estaba a cargo de la Dirección de Lucha contra el Narcotráfico (DLCN) de Honduras. Así como el asesinato de Alfredo Landaverde dos años después (2011), quien participaba de forma activa en entrevistas nacionales denunciando el crimen organizado.
Juan Orlando Hernández fue juzgado en Nueva York del 20 de febrero al 8 de marzo de 2024. Fue declarado culpable por delitos relacionados con drogas y armas. La condena de cuántos años pasará en la cárcel se conocerá el 26 de junio 2024.
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Juicio a Juan Orlando Hernández y los crímenes
En el tercer día del juicio, el 22 de febrero, contra el exmandatario hondureño, el narcotraficante y exalcalde de El Paraíso, Copán, Alexander Ardón, acusado también por la fiscalía de Estados Unidos por tráfico de drogas en el 2019, admitió abiertamente haber conspirado para asesinar a González y Landaverde.
Landaverde fue acribillado por sicarios mientras conducía su vehículo. El crimen ocurrió en el Boulevar Los Próceres a la altura de la entrada de la Colonia 21 de Octubre de la capital Tegucigalpa.
Días antes de ser asesinado, Landaverde en medio de una entrevista televisiva denunció que, en Honduras, el narcotráfico estaba infiltrando los partidos políticos, empresas, gobierno y las Fuerzas Armadas.
Alfredo Landaverde fue coordinador de la Dirección de Lucha Contra el Narcotráfico (DLCN), miembro del Partido Democracia Cristiana (PDC) y experto en materia de seguridad.
El PDC, mediante un comunicado de prensa demanda al Estado de Honduras reabrir el caso de investigación por la muerte de su compañero ahora que han surgido nuevos detalles acerca del crimen.
“Con la información derivada de este juicio más la que ya tienen en su poder los organismos de justicia de Honduras. Ya basta de ese silencio cómplice del Ministerio Público y la Corte Suprema de Justicia. Tienen suficientes evidencias para actuar”, demanda el apartado.
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Fiscales del Ministerio Público
En el décimo día del juicio, salió a relucir el asesinato del fiscal hondureño, Orlan Chávez, quien fue interceptado por sicarios el 18 de abril del 2013 y quien fungía como jefe de la Unidad de Lavado de Activos de la Fiscalía Especial Contra el Crimen Organizado también conocido como el “Fiscal de Oro”.
Mario Mejía Vargas, expolicía hondureño pasó al estrado a testificar y confesó haber solicitado a un abogado llamado “Wilmer” para que asesinaran a Chávez.
“A través del abogado Wilmer contraté para matar al fiscal Orlan Chávez y no recuerdo que pagué 5,000 dólares, yo sólo contraté una vez para asesinar”, declaró.
Al preguntársele si sería procesado por el asesinato de Chávez, el expolicía manifestó que ya se encuentra pagando por ese crimen ante la justicia de Estados Unidos.
“Eso se cometió en Honduras. No sé si se aplica la ley estadounidense, pero lo estoy pagando aquí”, respondió.
También las muertes violentas de Olga Eufragio y Marlene Banegas en 2014, ambas fiscales del Ministerio Público, se presume que fueron víctimas del narcotráfico en Honduras.
Periodista hondureño asesinado por cártel de drogas
El 29 de febrero del 2024, en el juicio del expresidente Hernández, el narcotraficante también detenido en New York, Devis Leonel Rivera Maradiaga alias “El Cachiro” confirmó que fue quien ordenó matar al periodista Aníbal Barrow.
El periodista conducía el programa “Anibal Barrow y nada más” en el canal hondureño, Globo TV.
Maradiaga admitió que “Los Cachiros”, la organización criminal hondureña dedicada al narcotráfico, decidió asesinar a Barrow debido a sus críticas al cartel.
Fue el 24 de junio de 2013, cuando Barrow fue secuestrado en la ciudad de San Pedro Sula, cerca del Estadio Olímpico Metropolitano y horas después hallaron abandonado su vehículo.
No fue hasta el miércoles 10 de julio cuando se encontró el cuerpo del periodista dentro de una laguna.
Otros crímenes sin esclarecer
Nery López Sanabria conocido como “Magdaleno Meza”, ligado al cartel Valle Valle se puso en disposición de la justicia estadounidense en el 2019 mientras esperaba juicio en Honduras, según un audio que circula en los medios de comunicación hondureños.
“Estoy abierto a cualquier tipo de acuerdo que se quiera hacer para que sea beneficioso para ambas partes. Tengo bastante que puedo ofrecer para ayudar, espero que esta reunión sea de éxitos”, expresó en el audio refiriéndose a la Administración de Control de Drogas (por sus siglas en inglés, DEA).
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Nery López agregó que se encontraba con “la disponibilidad al día con lo que sea necesario para la DEA y poder trabajar para ellos dándoles la información que me pidan”.
“Magdaleno Meza” entre los asesinados
Sin embargo, poco después fue asesinado en el interior del Centro Penitenciario de Máxima Seguridad “El Pozo 1” de Ilama en el departamento de Santa Bárbara el 26 de octubre del 2019.
Se dió a conocer que Meza fue uno de los autores de las “narco libretas”, que le fueron decomisadas en un operativo en el 2018. Las mismas que citaban a Antonio “Tony” Hernández, hermano del expresidente Hernández.
Esas pruebas fueron presentadas como evidencia en su juicio en la Corte del Distrito Sur de Nueva York, donde “Tony” fue declarado culpable en 2019.
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Las narcolibretas sirvieron para la condena por cuatro delitos vinculados al narcotráfico de Tony Hernández.
El 9 de diciembre del mismo año en que se silenciaba la vida de Meza, fue asesinado su apoderado legal, el abogado José Luis Pinto. Y días después, se registró la muerte violenta de Pedro Armas, director del centro penal El Pozo, donde asesinaron a Meza.
Las muertes violentas continuaron cuando el 22 de junio del 2023, en el interior de una panadería en la ciudad de San Pedro Sula fueron asesinadas tres personas; Erika Julissa Bandy García, esposa de López Sanabria y sus dos guardaespaldas, Andrés Hernández u Jesús Gómez.
El triple asesinato no ha sido esclarecido por el Ministerio Público de Honduras. Los sicarios portaban falsa indumentaria policial como chalecos con insignias de la Dirección Policial de Investigaciones (DPI).
